Según el Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo
“La evaluación de los factores psicosociales es una herramienta cuyo principal objetivo es aportar información que permita el diagnóstico psicosocial de una empresa o de áreas parciales de la misma, a fin de poder establecer actuaciones de mejora adecuadas a los riesgos detectados y al entorno en el que éstas deban ser llevadas a cabo.”
Las empresas deben de tener en cuenta este tipo de riesgos, puesto que a corto y largo plazo pueden ser perjudiciales. A corto plazo, se suele notar a los trabajadores con situaciones de “estrés” con síntomas notorios como la apatía o marearse en la oficina. Pero si este tipo de situación continua, en el peor de los casos, se puede dar el suicidio de un trabajador.
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Los factores de riesgo psicosocial son aquellas condiciones de trabajo derivadas de la organización del trabajo, para las que tenemos evidencia científica suficiente que demuestra que perjudican la salud de los trabajadores y trabajadoras. Estas se agrupan en 6 tipos:
- Exceso de exigencias: por ejemplo, cuando se exige demasiado, o trabajar rápido o de forma irregular. Si no existe confianza el equipo y los trabajadores tienen que esconder sus sentimientos o si no tienen la oportunidad de expresar su opinión.
- Carencia de influencia y de desarrollo: por ejemplo, cuando los trabajadores no disponen de libertad para realizar sus tareas o cuando no pueden poner en práctica todos sus conocimientos y habilidades.
- Falta de apoyo y de calidad de liderazgo: por ejemplo, cuando los trabajos a realizar no están bien definidos o no se establecen plazos de entrega o, por el contrario, no permiten el tiempo necesario para realizar correctamente una tarea. Si no existe apoyo por parte de los directivos o entre el equipo de trabajo.
- Mínimas compensaciones: por ejemplo, si se dan rotaciones de puestos en contra de la voluntad de los trabajadores, si no se valora su trabajo o realizan cambios sin notificar a los empleados.
- Doble presencia: cuando realizan cambios en el horario laboral, por ejemplo, sin aviso y no se puede conciliar la vida laboral y personal.
- Bajo capital social: por ejemplo, cuando no hay confianza entre trabajadores y dirección.
Desde hace más de 50 años se estudian estos factores y ha quedado comprobado que el exceso de estos puede ser perjudicial para la salud de las personas.
Es más, la exposición laboral a factores psicosociales se ha visto relacionada principalmente con enfermedades cardiovasculares como los infartos, trastornos mentales como la ansiedad o la depresión y problemas musculares o esqueléticos como contracturas o dolores de espalda.
El proceso de evaluación de riesgos psicosocial consiste en identificar, evaluar y valorar los riesgos psicosociales presentes en una situación de trabajo para eliminar o atenuar tales riesgos y establecer las medidas preventivas que resulten oportunas, según el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Existen diversos métodos y sin conocer a la perfección un caso no se sabe identificar cual va a ser mejor aplicar. Pero muchas veces la combinación de varios métodos termina siendo la opción más eficaz.
- Identificación de los factores de riesgo.
- Elección de la metodología y técnicas de investigación que se han de aplicar.
- Planificación y realización del trabajo de campo.
- Análisis de los resultados y elaboración de un informe.
- Elaboración y puesta en marcha de un programa de intervención
- Seguimiento y control de las medidas adoptadas.
Los dos métodos de evaluación utilizados, más comunes, son Método CoPsoQ ISTAS 21.Versión 2 y el método FPSICO 4.0
Si quieres más información sobre la evaluación de riesgos psicosociales o te gustaría realizar una evaluación en tu empresa, pero quieres un presupuesto, no dudes en contactarnos. Te atenderemos encantados y sin compromiso.